domingo, 17 de agosto de 2008

LA LUNA LLENA, LAS TONADAS, SIMÓN DIAZ Y ESTOS DIAS DE PRUEBAS





La versión de Tonada de la luna llena de Caetano Veloso que me gusta mucho

La luna está llena, en una noche difícil, como difícil ha sido mi vida. No me quejo, la vida de todos ha sido difícil, pero estoy en un momento de duras pruebas. Con esta luna recuerdo la Tonada de la Luna llena de Simón Diaz, que es un canto de ordeño, que me hace pensar que me ordeña la vida, la luna misma me ordeña. Dice Gurdjieff que la luna vive de la energía que generan nuestros conflictos emocionales, que de esa energía se alimenta y así se desarrolla en busca de convertirse en un planeta. Quizás es una alegoría de que ciertas entidades se alimentan de nuestros sentimientos negativos.

En los llanos venezolanos, durante la época de lluvia, que dura seis meses se aprovecha que el ganado se puede confinar a una zona pequeña y que hay suficiente comida, y se ordeñan las vacas.
Las vacas se encierran y se separan de sus becerros la noche anterior, de madrugada se van liberando una a una las hembras y sus crías, para ello se nombran: El ordeñador, con su soga va cantando una tonada que menciona el nombre de la vaca a la que le toca turno, la vaca y el becerro se llaman igual, cuando oyen su nombre saben que serán liberados y se ponen a las puertas, el becerrero tiene el trabajo de liberar solo esos animales, la hembra se ata y se le pone el becerro para que baje la leche y luego se retira para ordeñarla. Siempre cantando, el ordeñador hace su trabajo eficientemente, y la canción sirve para hablar de las novedades, del paisaje, de sus dolores propios. Solo se puede ser veraz a través de la poesía, por eso las Tonadas las puede entender cualquiera, aunque no sepa nada de campo. Simón Díaz era becerrero cuando niño, y compuso esta bella tonada que hoy recuerdo con cierta tristeza, viendo a la luna y preguntándome ¿hasta cuándo le daré de comer a la luna?


TONADA DE LA LUNA LLENA
Yo vide una garza mora
Dándole combate a un río
Así es como se enamora
Tu corazón con el mío

Luna llena, luna llena
Menguante

Anda muchacho a la casa
Y me traes la carabina
Pa’ mata’ a ese gavilán
Que no me deja gallina

La luna me está mirando
Yo no sé lo que me ve
Yo tengo la ropa limpia
Ayer tarde la lavé

Luna llena, luna llena
Menguante.
Simón diaz

miércoles, 6 de agosto de 2008

ANDRÉS ELOY BLANCO Y LA LOCA LUZ CARABALLO


El 6 de agosto de 1897 nacé en Cumaná el poeta popular de Venezuela Andrés Eloy Blanco. Me llamó la atención que nadie hizo mención de esto, así que decidí publicar algo en homenaje de este querido poeta.

Este hombre prolífico en la poesía, insistente en la política y reconocido en la amistad se graduó de Abogado en la Universidad Central de Venezuela en 1919, ya era conocido opositor de la dictadura de Juan Vicente Gómez y había sido preso en la famosa cárcel La Rotunda. Le pusieron a San Fernándo de Apure como ciudad por prisión, allí como abogado defiende en juicio a Doña Francisca Vázquez de Carrillo, la mujer que inspiró a Gallegos a su famosa Doña Bárbara. Esto me hace pensar que los hombres notables generalmente conocen otros hombres notables. Luego de ganar varios concursos literarios en Venezuela y de publicar en diversos periódicos venezolanos y de editar otra impresos gana en 1923 el Primer Premio en los Juegos Florales de Santander, certamen hispanoamericano patrocinado por la Academia de la Lengua Española, con su poema: Canto a España, poema este que le da fama fuera de Venezuela.

En 1932 mientras estaba confinado en Timotes, Estado Mérida, de boca del niño Edecio LaRiva Araujo, futuro político venezolano, oye el poeta la leyenda de la Loca Luz Caraballo del que luego escribe su poema Palabreo de la Loca Luz Caraballo, que aún hoy se puede oir de boca de niños del páramo en el parque que en honor a este personaje hay en Apartaderos.

Muchas son las anécdotas y vicisitudes que vivió este hombre, que entre otras cosas clamó al pintor: ¡Píntame angelitos negros! como pidiendo dejar atrás el racismo de unamanera hermosa. Una de ellas cuenta que el Gobenador de Apure que estaba encargado de su confinamiento en esa ciudad, se iba con Blanco en las tardes a hablar de literatura, de poesía y de música, ya que era este hombre un poeta y violinista reconocido, haciendo de estos enemigos políticos grandes amigos que los unía la fraternidad del arte.

Fue en su vida un poeta glorioso, un político enconado, un editor impecable, un diplomático consumado y un gran amigo de sus amigos, este venezolano fue un hombre notable, murió en México el 21 de Mayo de 1955 dejando un legado de poesía y venezonalidad.

PALABREO DE LA LOCA LUZ CARABALLO

De Chachopo a Apartaderos
caminas, Luz Caraballo,
con violeticas de mayo,
con carneritos de enero;
inviernos del ventisquero,
farallón de los veranos,
con fríos cordilleranos,
con riscos y ajetreos,
se te van poniendo feos
los deditos de tus manos.

La cumbre te circunscribe
al sólo aliento del nombre,
lo que te queda del hombre
que quien sabe donde vive;
cinco años que no te escribe,
diez años que no lo ves,
y entre golpes y traspiés,
persiguiendo tus ovejos,
se te van poniendo viejos
los deditos de tus piés.

El hombre lleva en sus cachos
algodón de tus corderos,
tu ilusión cuenta sombreros
mientras tú cuentas muchachos;
una hembra y cuatro machos,
subida, bajada y brinco,
y cuando pide tu ahínco
frailejón para olvidarte
la angustia se te reparte:
uno, dos, tres, cuatro, cinco.

Tu hija está en un serrallo,
dos hijos se te murieron,
los otros dos se te fueron
detrás de un hombre a caballo.
"La Loca Luz Caraballo"
dice el decreto del Juez,
porque te encontró una vez,
sin hijos y sin carneros,
contaditos los luceros:
... seis, siete, ocho, nueve, diez...

SILENCIO

Cuando tú te quedes muda,
cuando yo me quede ciego,
nos quedarán las manos
y el silencio.

Cuando tú te pongas vieja,
cuando yo me ponga viejo,
nos quedarán los labios
y el silencio.

Cuando tú te quedes muerta,
cuando yo me quede muerto,
tendrán que enterrarnos juntos
y en silencio;

y cuando tú resucites,
cuando yo viva de nuevo,
nos volveremos a amar
en silencio;

y cuando todo se acabe
por siempre en el universo,
será un silencio de amor
el silencio.




lunes, 4 de agosto de 2008

ASÍ HABLABA ZARATUSTRA, DEL HOMBRE SUSPENDIDO ENCAMINADO HACIA EL SUPERHOMBRE



"El hombre es una cuerda tendida entre el animal y el superhombre... una cuerda tendida sobre el abismo.
Un peligroso cruzar, un peligroso mirar hacia atrás, un peligroso estremecerse y detener el paso.
Lo que tiene de interesante el hombre es ser puente y no, fin; lo que puede amarse en el hombre es ser
tránsito y hundimiento .
Amo a los que no saben vivir sino encaminados al hundimiento, pues son los que cruzan el abismo."

ESTOS DÍAS RAROS DE BERGMAN Y BORGES


Del séptimo sello de Bergman

Estos días han sido días raros, he visto a Bergman, como con devoción pero con un temor al blanco y negro, que no me venía desde que tenía un viejo TV amarillo en mi cuarto, ese que trasmitía los canales en esos colores. Quizás el miedo a esas películas de terror en la madrugada desobediente del niño que fui. Tengo un cierto temor que sólo acá admito, pero no es ese temor bárbaro y novelero a la soledad, ¿Acaso es soledad la mía? es un temor como al futuro, a lo incierto, hago planes, buenos planes, bellos planes, y luego temo a ellos.

He visto una casa hermosa, como soñada, que hace una linea paralela con la linea de mi futuro. Sueño mi jardín colorido y fragante, pero temo tenerlo. He sido golpeado por la ceguera de Vallejo Buero y por la prosa poética y profética de Borges, leo sus cuentos como por obligación. He despertado estos días con amor a las letras, el sol que cambia su posición en estas montañas silenciosas afecta de un modo distinto mi ser estos días.

Me he acercado y disfrutado del juego de la seducción, pero con intención no he llegado a nada por medio de él. Seduzco y me dejo seducir pero no se consuma el juego, no hay ganador ni perdedor, es como una partida de ajedrez con tablas eternas, ahogo a mi rey y nadie lo nota. Disfruto de la mujer de una manera parca y sosegada, los pequeños placeres secretos que todos tenemos están tan presentes en mí estos días que no puedo más que disfrutarlos.

Estos días recuerdo sin dolor el pasado, no añoro nada, aunque extraño esa fuerza que la tristeza nos insufla en el pecho, ahora escribo con una honda alegría de no estar triste. Vi un canario bailar en el verde pasto de la mañana, oí a las flores desperesarse entre la maleza que las cerca, el sol tuesta las hojas viejas.

Hoy leí a Borges, oí a los clásicos, me bañe en agua de azahar, tome jugo de naranjas, desayune tostada de trigo rústica y higadillos con crema y ginebra Bombay, los aromaticé con brotes de ajo y cebolla, miré al sol, pensé en Dios y me senté a escribir, cosa que hace días no hacía. Me sorprendió en la mañana con una mirada añorada, a la que no correspondí, y en la soledad matutina de mi casa mire mi vida que es bella y fragante y que estos días está impregnada de tranquilidad. Y aunque la tormenta arrecia en el exterior, dentro de mi casita hay paz, pero en unos días raros de Bergman y Borges.